Tras la pandemia, las redes sociales tuvieron un crecimiento significativo, si bien eran consultadas y utilizadas sólo como escaparates visuales, muchos artistas y colectivos hicieron de estos medios plataformas de exhibiciones bajo conceptos y curadurías disímiles. Uno de estos proyectos es Gancho Galería, un espacio/cuenta en Instagram fundado por Livia Ánimas, Tania Campos y Kika Pérez en las que exploran la interfaz para darle vida a un proyecto de fotografía y video, además de pláticas con diferentes artistas. Platicamos con ellas y esto fue lo que nos dijeron.
1 ¿Cómo nace el proyecto?
Livia Ánimas.- Nace por la inquietud de que Gimnasio de Arte tuviera una galería virtual, así que ya con la experiencia de abrir los proyectos a nuevas colaboraciones, decidimos reunir nuestras ganas de seguir difundiendo y promoviendo proyectos, ahora en línea por medio de este IG como galería. A esto unimos el interés de mantener la interacción entre la gente y cada autor y de proponer más allá de solo la visualización e interpretación de las imágenes, por medio de las charlas en vivo.
2 ¿Cuánto tiempo llevan y cómo se ha desarrollado su trabajo?
L.- Iniciamos en marzo del 2021, justo con las participantes del programa Sirenas, medusas y brujas, hasta ahora tenemos tres exposiciones de diferentes temáticas y colaboraciones, ya que nos interesa la variedad de procesos artísticos.
3 Al ser un proyecto totalmente digital y de plataforma, ¿cuáles han sido las dificultades y los aciertos del proyecto?
L.- Los aciertos son poder plantear nuevos formatos de curaduría de disfrute desde esta plataforma, así que las dificultades pueden ser que es un espacio que necesita su propio lenguaje, su propia curaduría y eso es lo que estamos experimentando con cada exposición.
4 ¿Cómo han visto la respuesta de este proyecto?
Tanía.-Ha sido bien recibido, se ha ido posicionando poco a poco; es una realidad que las personas buscan espacios afines a sus intereses.
5 ¿Existen líneas temáticas recurrentes o con más peso dentro de sus actividades?
T.- No, de hecho, una de las premisas del proyecto es permitir esa libertad creativa y propositiva en cada exposición; incluso a pesar de estar estrechamente ligados a la fotografía y el video, la idea de Gancho galería es abrir sus puertas a otras disciplinas que puedan ser expuestas en este espacio.
6 ¿Qué diálogos se han generado por medio de este proyecto?
Kika.- Primero, un diálogo colectivo interesante, ya que la exposición Sirenas, medusas y brujas nos permitió que los proyectos que se crearon mediante un taller fueran expuestos y no solo se quedaran almacenados.
Luego, la colaboración con los chicos de Studio Arte 41 donde se expuso Esperar, estar, sentir, en la que se abordaron diferentes técnicas de las artes visuales, lo cual es muy importante porque ya hay muchos perfiles que solo se dedican a la fotografía, así que nos abrimos a todos los públicos.
7 ¿Qué más sigue o en qué otros cruces han pensado?
K.- Colaboración con colectivos, hacer alianzas con diferentes espacios y artistas para que sea mayor la difusión de su obra. Así como crear diálogos con artistas emergentes y la apertura a nuevos talentos, mayor difusión de la obra del artista, generar nuevos canales de comunicación para ellos.