“¿Qué tal si recorremos montañas? No hay tiempo o viento susurra”

Nos pregunta y nos responde un Bot de Twitter de la cuenta Visual Trance, creada por el productor, escritor y diseñador mexicano Carlos Ramírez y la poeta y artista visual Alejandra Olson, quienes unieron esfuerzos y talentos para crear un proyecto de escritura audiovisual, cimentado bajo el nombre de Visual Trance.

Trance, viaje, visión. Un proyecto que busca la confabulación entre lo biológico y lo tecnológico. Un proyecto que se desgrana en diferentes plataformas digitales, como el Bot ( robot programado de Twitter), o la visualidad que se desgrana en su cuenta de Instagram en donde las fotografías, las imágenes, juegan con la persistencia de un posible mundo en la que lo tecnológico se confunde con seres vivos de extrañas formas, mutaciones. Visual Trance para insertarnos en un mundo delicado, pero habitado por extraños híbridos, ojos cibernéticos, máquinas que se transforman, que nos recuerdas que la transformación es parte de la naturaleza, de la vida.

Visual Trance planea entre las posibilidades amplias de la poesía visual, de la vídeo poesía, del performance, como el realizado para presentarse en sociedad en el marco del Festival Kerouac realizado en el Centro Cultural de España el febrero pasado. Pero también el proyecto tiene un punto de encuentro con el papel: Un libro arte-objeto que se subastará a partir del próximo 19 de abril en Aguafuerte Galería.

Conversamos con los dos artistas, que decidieron generar este proyecto colaborativo, que, a partir de la letra, de la poesía, de los caracteres, busca encontrar un punto de acercamiento entre la tecnología y la vida. Dos voces, cuatro manos, que crean una voz diferente a partir del uso de la tecnología, de la visualidad, de la transformación. Alejandra Olson publicó en la antología Cuentos para picar (2015) de Letras Tintas y en la antología La lotería, del proyecto Seattle escribe 2018. Su poemario Blackout (2019) se publicó bajo el sello de Periferia de Escribidores Forasteros. Con Ediciones El Humo pública Del amor líquido en los paréntesis (probables) del Fabuloso Fred (2020). Cu29 (2020) es uno de sus proyectos de Escrituras Expandidas publicado en YouTube. Publicada en la antología La flor en que amaneces, tercera edición (2020) Ediciones Azalea (Venezuela), Bucle (2021) Niño Down Editorial, Autorretrato con la oreja vendada (2021) Ediciones Azalea. Publicación de una muestra poética en la Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano. Bucle (2022) y con Carlos Ramírez “Kobra”, Poeta, publicista y gestor cultural, coordinador de la Plataforma PLACA en México, gestiona eventos culturales como el Recital de Poesía Chilango Andaluz o el Gabinete Salvaje. Sus poemas se han publicado en diversas revistas y antologías de México y España; y en las plaquettes Los Salvajes de Ciudad AKA (Deleátur) y Una palabra con nombre bala (Dos10 Studio digital) en el poemario Own Dream Code (Editorial Ultramarina C&D 2020) el poemario transmedia dios un pixel (Centro Cultural Digital 2022), Cyber_BardX (2023). Sus videos forman parte de selecciones de diversos festivales de video poesía,

Javier Moro Hernández: ¿Cómo se da el inicio de creación de este proyecto?

Carlos Ramírez: fue una onda de colaboración, empezamos con una idea de escribir algo que fuese colaborativo y empezamos a escribir y soltar los caracteres y ya que se diera vuelo, pero además de caracteres se dieron gráficos, ideas, imágenes y se convirtió en muchísima más. Cuando vimos lo que se había creado, pues nos dimos cuenta de que no solo era como para poema tampoco es como un poemario no es como proyecto que se puede llevar a muchos más. Ahí pensamos que podía ser un proyecto de Literatura electrónica que pudiera ser tipo contenido para redes, como programar un Bot en Twitter, es decir utilizar las  cualidades que dan las redes sociales, por ejemplo en Twitter que puedes programar un Bot no o en Instagram que puedes hacer una navegación tipo grid, en la cual, pues puedes continuar un texto con una imagen y la imagen pueda fragmentarse hasta en seis, ocho imágenes distintas. Así empezó y ahí dejó a Alejandra, que es la buena en esta parte, porque después sucedió la idea de también construir una versión del libro arte objetos y ahí es la buena, sobre todo en el tema de ahora de la formación, pero también tiene muchísimo tiempo trabajando en el montaje y en la edición del libro.“

Alejandra Olson: Cuando comencé a ver cómo se iba construyendo el proyecto teníamos el material como para poder hacer el libro objeto, encontrar la manera de que este proyecto, que es interdisciplinario, porque de un punto que partimos se fue extendiendo y pues fue muy fue muy orgánico todo, todo fue fluyendo hacia lo que se ha desarrollado. Teníamos muchos visuales, que son parte del proyecto, y se me ocurrió un día y le dije a Carlos que si me metía con el libro arte-objeto a construir uno, creo que podría quedar algo bien interesante por todos los visuales que hemos construido, y me puse a trabajar y Carlos me ayudó un montón, para ir generando las imágenes de manera que pudiera utilizarlas, para adaptarlas en los espacios que se va construyendo en el libro, hasta que quedó el libro de arte objeto, que es un acordeón que va creciendo, que va saliendo, que se va extendiendo tridimensionalmente, y esa es otra de las vías en las que se fue construyendo Visual trance.”

JMH: Esta interacción no entre tres plataformas, que es el libro, Instagram y Twitter, todo teniendo como punto de partida la poesía, el texto, la palabra, pero también es muy interesante porque es un viaje biotecnológico. En ese sentido quería preguntarles cómo se interactúan lo biológico y lo tecnológico y además lo lingüístico.

CR: De entrada, escribir a distancia con las herramientas tecnológicas, pues te tiene justo sobre la pantalla ya es parte de usar la tecnología. Cuando haces un Bot tienes variables que pueden funcionar para que después en la escritura que hace justamente el Bot sea programática, justamente sea generativa más bien, nosotros le damos con ciertas variables y después genera cosas en ese sentido, pues ahí va como la interacción directamente o como el puente tendido hacia la tecnología, en una primera instancia. En otra instancia, también nosotros tenemos algunos gráficos, que de hecho es un dibujo de Ale que después la metimos en una inteligencia artificial y se fue procesando, hay otra cosa que es como un caligrama que decía solamente visión, pero en diferentes formas, y que de igual forma lo metimos en la inteligencia artificial y después de pasarlo varias veces, pues fue creando un mundo completamente distinto, parecía como una película de ciencia ficción. Ahí está presente también esa comunicación. ¿Por qué sucede esto? Porque el concepto va justamente de que es un trance, es una especie de viaje en el cual estábamos inmersos los dos, pero también estaba inmersa la tecnología, y en ese sentido creo que un paso para justamente acudir, como dijo Ale, era utilizar estas inteligencias artificiales, esta programación que permiten la red de Twitter para hacer estas cosas. Después empezamos a hacer la parte audiovisual que ya fue presentada justamente en el Festival Kerouac a manera de performance en vivo. Y de alguna manera eso es una interacción con lo biológico, no con el cuerpo.

JMH: Les quería preguntar un poco también sobre el tema del libro, me parece muy interesante, porque no estaba pensado así originalmente, como un libro, fue un proceso de poesía que al final o una de las partes uno de los puntos fue terminar en un libro.

CR: Pienso que un poco, que ya tras la cuestión Carreón, de toda la visión Carreón, que no sé dónde estamos actualmente, y sobre todo en las digitalidades, también es justo decir o preguntar cuál es el proceso del libro exactamente. Más bien creo que se define como un proceso de escritura yo diría, y a partir de ahí vienen como las diferentes modalidades, los diferentes formatos, en donde pueda entrar una red social, o un libro de artista, o una presentación performance- audiovisual. Siento que más bien ese es el tema, no verlo como un proceso libro, sino como un proceso de escritura.

AO: Sí, justo, porque como dice Kobra, nos podemos preguntar actualmente qué es un libro,  nos hacemos esa pregunta, que creo desde Carreón se hizo y  nos deja ahí la pregunta o la interrogante de si podemos definirlo, pero creo que actualmente ya no podemos separar o por lo menos, desde mi perspectiva ya no hay estos filtros donde esto se va a posicionar aquí o esto acá, no se separa, el arte creo que se empieza a juntar desde de diferentes maneras, y al final el libro también tiene que ver con lo tecnológico, porque aunque es hecho a mano, todo visual viene desde esta este trabajo con la tecnología pero interviene también el cuerpo al 100% pero nunca se separa de la tecnología, o sea las partes visuales no se hacen a mano todas. Ahí sigue estando este concepto de trabajar el cuerpo y la tecnología al mismo tiempo.

JMH: Es muy interesante que es un proceso colaborativo, de escritura colaborativa, en donde de cierta manera uno deja de lado ciertos egos, o ciertas cuestiones, ciertas visiones personales para integrarse en otra cosa, en otro texto digamos, dejas de ser tu voz narrativa o tu voz poética para integrar/te en una voz distinta y eso también de cierta manera, podríamos pensar en una programación distinta, en un proceso distinto de integración de lenguajes.

CR: Es el proceso creativo el que llevo esto, pero no exactamente por el tema de autoría, sino por ver el proceso creativo puede generar cosas. Justo diría eso no este potenciar el proceso creativo ante el proceso de autoridad.

AO: Sí, totalmente de acuerdo con Kobra, para mí es potenciar el proceso creativo y creo que  desde un principio no nos interesó el proceso de autoría, creo que fue la idea de estar en esta conjunción, sí cambiando tal vez nuestras programaciones por separado, pero para mí sí, fue un trabajo bastante sencillo de que se diera. Creo que quedó siempre fuera o nunca estuvo antes que el proceso creativo juntos, que al final es lo que valió todo,  es lo que ha valido todo este proyecto, este proceso que nos ha llevado a estar generando cosas, y por ejemplo las piezas que dice Kobra del caligrama o del dibujo que yo hice y luego se lleva la inteligencia artificial, fue una conjunción, o sea, salió de una parte y la otra parte la complementan. Creo que también fuimos como complementarios en muchos procesos que nos ayudaron a que saliera todo el proyecto.

JMH: Ya casi para terminar preguntarles un poco sobre el proceso de Inteligencia Artificial, de la cual se está hablando mucho recientemente, sobre esta posibilidad, esta idea, este miedo de que la inteligencia artificial pueda sustituir al autor. Me parece muy interesante el uso de esta tecnología para la generación de nuevos de proyectos artísticos y literarios. ¿Cómo valoran este proceso de la inteligencia artificial?

CR: Creo que de alguna forma estamos enfrentados al de la inteligencia artificial desde hace años. Al final de cuentas un software de Inteligencia Artificial a que tú le das sentencias y te genera ciertas cosas o un software de visión de vídeo, por ejemplo, justamente tienen años ya en el mercado, y no han reemplazado a nadie, sino que más bien han generado procesos de aprendizaje de cómo utilizar estos softwares para poder seguir haciendo actividad creativa. Creo que más bien en lugar de potenciar justamente el tema de la autoridad va a potenciar el proceso educativo, y vemos ahora piezas que tienen como una suerte de programación que va detrás y por dar un ejemplo hay piezas que tienen una programación en la cual va generando diferentes caracteres o diferentes imágenes poligonales en pantalla y que después eso se mete en  un mercado de NFTS, que hace una captura de pantalla y esa es la obra digital que se vende, digamos la captura de pantalla, pero en realidad lo que le da valor a esa captura de pantalla es todo el proceso. Es justamente hacia dónde va apuntando la cosa, no va apuntando a reemplazar a un escritor, por ejemplo a un artista, va apuntando a que esas herramientas, el uso de esas herramientas potencian la actividad creativa, pero a través del proceso no a través de la autoría.

AO: Estoy de acuerdo con Kobra, totalmente, porque no es que la que la inteligencia artificial va a generar por sí sola, siempre es una herramienta que va a hacer que el artista, que el creador tenga otras posibilidades. Creo que eso es lo importante o lo interesante de la inteligencia artificial; la posibilidad de todo, o sea, te abre N cantidad a potenciar esa creatividad o ese proceso creativo y la misma pieza, porque a lo mejor una pieza puede llegar, puede tener, no sé tres tres procesos y después llegas a ese tercer proceso y dices me puede dar más. Todo eso te lo da la inteligencia, todas esas herramientas, como para ver hacia otras hacia otras vertientes y otras posibilidades de la misma pieza.

JMH: ¿Habrá presentación de nueva cuenta del libro o del performance?

AO: Todavía no sale nada en redes ni nada, pero no creo que tarde mucho en comenzar a salir una expo – subasta que será el día 19 de abril en Aguafuerte Galería y ahí expondremos el ejemplar número uno y de ahí ya estamos pensando en el siguiente paso sobre el libro- objeto, pero digamos que lo que va a abrir la venta o el poner el libro para que la gente lo empieza a conocer será partir de la subasta.